Hoy Susana tenía una caja de madera vieja sin utilidad y quería hacer una pizarra de arena para practicar la escritura. La idea es fantástica porque estimula el tacto a la vez que se practica la escritura o grafía en general, y ¡reciclamos!. Además resulta bastante relajante, incluso recuerda a los minis jardines zen que tan de moda se pusieron hace años para reducir el estrés.
Por otro lado es altamente recomendable para aquellos niñ@s que sienten pavor a equivocarse, a "estropear" el papel o la ficha, y que si les sale mal se frustran con facilidad. En esos casos este tipo de pizarras domésticas les ayudará a ganar confianza y relajarse, porque aquí los errores son hasta divertidos pues sacudimos un poco el cajón de madera y volvemos a empezar.
Como siempre lo podéis hacer a vuestra manera. Básicamente necesitáis:
- Una caja. Nosotras hemos querido reciclar y hemos aprovechado esa cajita compartimentada, forrando el fondo con papel autoadhesivo de colores fluorescentes para añadir el elemento sorpresa. También podéis hacerlo con una simple caja de cartón, o con la tapa de una caja de zapatos. Podéis engancharle un fondo, o pintarlo, o dejarlo tal cual, va a gustos, aunque l@s peques suele preferir los colores, de hecho os pueden ayudar a pintarlo y así disfrutan un buen rato.
- Arena, harina o sal, un medio sobre el que escribir. En este caso hemos optado por la sal, pero la harina fina tipo harina de arroz o maizena seguro que es una sensación muy agradable.
- Un modelo de letra, número o incluso dibujos sencillos que el niñ@ deberá reproducir. En las imágenes podéis ver que hemos optado por poner pinzas de tender la ropa boca abajo, forradas con el mismo papel autoadhesivo, y por suerte encajaban perfectamente, así con simples pedazos de folio hemos podido preparar un montón de letras y números. Pero también podéis optar por imprimirlas en folios individuales y dejárselas en un lateral de una en una.
Iniciarle con letras de su propio nombre siempre es más motivador, y seguir luego con los nombres de los miembros de la família o compañeros de clase o amigos, es un buen recurso. Es más fácil iniciarse en el trazo limpio y sencillo de las mayúsculas. Y es importante acompañar la acción siempre con nuestra palabra, enseñándole a identificar primero el sonido de las letras y más adelante el nombre de las letras. Y haz que se familiarice con la dirección adecuada que debe seguir al formar la letra.
CONSEJO DE PETRA: Vigilad que no se coman la pizarra!
Hola, hoy hemos hecho la prueba con harina y les ha gustado más aún, porque las letras se marcan con más facilidad y es mut suave!
ResponderEliminar