Las "botellas sensoriales" sencillamente son botellas, normalmente de plástico del agua o de refrescos, con objetos y líquido en su interior para captar la atención del niñ@. ¿Quién no se ha quedado embobado alguna vez observando una pecera? Pues ese mismo efecto relajante puede producir en el niño que, agitando la botella, observa como los objetos de su interior se desplazan lentamente hacia el fondo. Pero al mismo tiempo también pueden emplearse para estimular, para provocar que busque o fije su mirada, en el interior de la botella, en un determinado objeto o color.
En las fotos podéis ver a Gonzalo agitando la botella de agua con "pompones" de colorines en su interior. Primero le dejamos explorar a su manera, girando y sacudiendo el agua según su curiosidad. Luego intentamos captar su atención sobre los pompones de un color.
CONSEJO DE PETRA: Esta misma actividad se puede realizar, por ejemplo, introduciendo esas gomitas que tan de moda se han puesto para hacer pulseras y que podemos encontrar en cualquier bazar; o bien introduciendo las "chinchetas" de plástico que vienen en los juegos de hacer mosaicos; o con garbanzos, o arroz,... El único límite vuestra creatividad!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tus comentarios y opiniones. Esperamos ser de ayuda.